Hace unos días tuve que hacer un pastel para l'Avi, un abuelito que cumplía 82 años, a quien le encanta jugar al billar.
Fue muy divertido personalizarlo en azúcar... y me cuentan que cuando se vió y se reconoció ¡no se lo podía creer!! Lo que daría yo por estar presente en ciertos momentos...
En fin, os dejo aquí las fotos de otro de los Pedacitos de felicidad!!
2 comentarios:
Que pasada!! te ha quedado perfecta! Y que gran obra!!
Besitos!
Pequeña gran obra!!! es genial!
Publicar un comentario